lunes, 26 de septiembre de 2011

No esperes a que te lo cuenten

Sal, mójate, ve.
Si algo te gusta y te apetece, mueve el culo de tu cómodo asiento, quítate las legañas de tanto ordenador o tele, ponte reina o rey y ve a comerte el mundo o un pedazo del pastel que te espera.
Es tu amigo, y, si no lo es, puede llegar a serlo, o puedes encontrarte con otros amigos, incluso hacer nuevas amistades.
¿Qué sacas con poner en el facebook "Me gusta" o "Asistiré" al evento?
¿Qué tontería es ésa de escribir públicamente "Me pilla muy lejos" o "estoy de vacaciones", etc? Y luego viene lo de: "Colgarás fotos ¿no?" "¿Cuándo lo podré ver en youtube?".
O sea, no piensas ir pero pretendes quedar bien. ¡Anda ya! ¡Miau!
En todo caso, descuelga el teléfono y llama o manda un mensaje privado. Hazlo bien. A los demás nos importa un pito que te excuses públicamente.
Y si piensas ir, ve y punto. Sea como sea y cueste lo que cueste. Harás feliz a tu amigo y tú lo pasarás bien seguro, saldrás enriquecido.
Que no te lo cuenten, VÍVELO, que es de lo que se trata, de VIVIR.

¡Lirolirolaralá!

Esta semana pasada he vivido a Juan Luis Saldaña y sus "Armas de seducción masiva" en Zaragoza Activa. Totalmente seducida.
También a Paco Rallo y su montaje en Enlatamus "La belleza de los objetos en desuso y su memoria compartida", a Metano, a David Giménez y su Imperdible. Todo un remolino emocional.
Y a toda la gente que acudió a ambas citas.
Aquí la prueba.
Para los que les gusta ver fotos o que se lo cuenten.
Y para los que, como yo, les encanta recordar momentos felices.










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